La segunda parte de la película «Sexo en New York» ha contando con grandes sponsors que usan la técnica del «product placement», es decir, publicidad dentro de la película, como una bebida que suele beber el protagonista, el coche que usa, etc.
Con este tipo de publicidad más de algún millón habrán podido pagar los productores de este film que se han gastado 100 millones de dólares, sin contar los gastos de márketing y publicidad.
Algunas de las marcas que han apostado por esta película son el vodka Skyy, que ya estuvo presente en la primera Sexo en Nueva York, o Apple: el ordenador de la periodista Bradshaw. También el champán de LVMH, Moet Hennessy, y HP, que ha introducido su portátil específicamente diseñado para mujeres.
Por último, no nos podemos olvidar, de los cochazos de la marca Mercedes con las que las protagonistas de esta película se pasean de un lado para otro.