Dos jóvenes y grandes actores como Ryan Gosling y Kirsten Dunst se han puesto a las ordenes de Andrew Jarecki para rodar All Good Things, una especie de thriller con tintes románticos que cuenta la historia de una pareja, él es el hijo de una pareja adinerada de Nueva York y ella por el contrario pertenece a un estrato social humilde. Entonces se produce una desaparición que hace que empiece a investigar un detective de los clásicos del cine negro, de los de botella en mano y ni un centavo en el bolsillo.
El director Andrew Jarecki gano bastante crédito con su primera película, Capturing the Friedmans, un documental en el que contaba como se desmoronaba la familia Friedman tras el arresto, juicio y condena de dos de sus miembros, el padre de familia, Arnold, y el hijo menor Jesse, acusados de abuso de menores.
