El guitarrista de los Rolling Stones Ronnie Wood se internó en una clínica de rehabilitación por decisión propia para combatir su alcoholismo. Lo irrisorio es que lo hizo luego de participar de una cata de vinos.
El guitarrista de de 61 años se internó en la clínica Priory de Londres, aunque su vocera ha dicho que «lo puede controlar«.
Esperemos que sea el propio Wood el que comience a cuidarse, ya que una recaída a su edad y luego de tantos tratamientos, puede ser peligrosa.