Normalmente estamos acostumbrados a que el cineasta Ridley Scott nos sorprenda con sus películas y no por sus declaraciones, aunque en este caso no ha sido así. Si hace poco aseguraba que quien lleva los pantalones en el matrimonio Penélope Cruz – Javier Bardém es ella y que él es un “agonías”, no se ha quedado corto con lo que ha declarado sobre Exodus.
Esta película que nos narra la historia de la huida del pueblo hebreo de los faraones egipcios, ha usado actores de raza blanca para los papeles principales, pero por una razón en especial según el director.
La elección de los actores fue criticada por haber elegido a Christian Bale, Sigourney Weaver o Joel Edgerton entre otros. Pero lo que ha ocurrido seguro que generará muchas más críticas aún dado que ya se sabe por qué no eligió a actores con rasgos árabes.
Según las propias palabras de Scott: “No puedo montar una película con este enorme presupuesto donde hay que depender en gran parte de las devoluciones de impuestos en España con un actor principal cuyo nombre real sea Mohammed. De esta forma no conseguiré financiación de ninguna clase para poder llevar a cabo el rodaje de la película”.
Este comentario no ha sentado nada bien a muchas asociaciones, donde deja caer que el nivel de racismo en España está muy patente y que por ello no puede hacer una buena película.
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